Intentar condensar, recordar, revivir los recuerdos y vivencias de estos cuatro días será imposible,siempre se pierde, de manera consciente o de la otra algunos detalles esas chispas que nos hacen grandes y humanos,mezquinos también.
El jueves madrugué,tenía un encuentro con alguien importante,alguien a quien no conocía en persona y de quien me he traído un trocito, yo creo haberme quedado allí un poco también. ¿están ricos los polvorones? jajajajajja,anticipo de navidad y sólo la confirmación de algo que sé desde siempre recibir es agradable pero mirar a quien recibe lo es muchísimo más. Un viaje rápido, otro coche ,mejor que el mio y mucha carretera,un camino que ya me sé de memoria,tantas veces lo he disfrutado y sufrido, los pueblos, los campos que varían en su ciclo ajeno a mis pensamientos pero adornardos, a veces alegrando mis ojos otras cooperando a mi tristeza. Ese viaje es uno en muchos,cada vez distinto, el mismo camino pero siempre cambian los personajes, el principal (yo) y los secundarios, los árboles,los pájaros, las líneas continuas de la carretera, los camioneros que te ayudan a pasarles y la comunicación que se establece al agradecérselo con los intermitentes. Medinaceli, siempre en lo alto llamando y siempre sin tiempo para detenerme. Los pueblecillos de Soria, su tiempo detenido, casi muerto. Un iglesia en lo alto ,para recordarnos lo efímeros que somos, un cementerio ,pequeño, con un rico dentro (su nicho es media camposanto,aguda aguja que pregunta al cielo) pueblos de tierra,gris como su futuro. Cuatro viejos al sol y cuando mueran, la nada,pareces caídas y raíces perdidas. Un bosque explotado,arañado antes de la capital,que no es tal si no un pueblo a quien se le olvidó crecer,a quien han dejado esquinado,no es camino a nada, no es meta de nadie. Soria sus dos ríos, Golmayo el pobre y el Duero ,historia y lentitud. algún edificio nuevo y el locutor de la radio intentando con su voz alejarnos de la sensación de traición a esa ciudad. más pueblos y una recta inmensa,ya cambia el clima se acerca mi puerto, más frío mas vegetación, algún recuerdo al cruzar el río Tera. Pocos viajeros y el último pueblo a este lado Poveda, un bar tristón y el mismo olor,el mismo viejo al sol, el mismo perro asustado. Subida al puerto y el primer placer ,la nieve a los lados, el túnel del faraón nunca acabará esa obra o lo hará cuando yo, ya no vaya más.
Nieve en la cumbre ,1770 mts, puerto de Piqueras. La primera fuente , una bajada entre árboles, una parada y alguna fotografía, en otro tiempo "A una hora del paraíso." Más bajadas y el río Piqueras,casi un bebé, mas tarde muere en el Iregua. Puentes,curvas y la naturaleza que se prepara para dormir, las hayas doradas . Mi fuente, los Eros, el río camina conmigo abajo, casi no se ve pero acompaña. Pueblos, mas alegres, Los Cameros y de repente la sierra se rompe para morir en llano. Ya queda poco ,más recuerdos de las veces que he parado, lilas,flores de frutales ...
Llego a la ciudad y con miedo a perderme , por una vez lo hago bien, un camino nuevo, una nueva persona , un pueblo historiado y una hora , campanas . Ya llegas un saludo ,saber que eres tú ,sin haberte visto antes, paseo ,mercado, vinito y mas paseo. Una comida escogida, un buen lugar y las horas que pasan sin sentir, estamos bien, hablar y conocerse. Los camareros nos miraban mal, tres horas de tertulia,de hablar y saber, de conocer. Más paseo,la tarde se quiere ir, el río claro, transparente, la fuente salada y las sensaciones, la noche,el frío y caminar y hablar. Iglesias antiguas,de rezos pegados a los cirios, de campanas cansadas de tanto marcar las horas. Escaleras, mil veces pisadas,bodas ,bautizos y entierros marcan nuestros tiempos. Intercambiamos nuestra música,alguna película . Un cena muy agradable y a dormir. Llega la mañana ,con malas noticias,una muerte, esperada pero siempre triste. Despedida y una duda que siempre me asalta, ¿regresaremos?.
Una larga perífrasis para acabar en una viaje de noche, terrible,cansado ,café y música, y prisas ,mala compañía. La noche, perfecta,mis estrellas colgadas,como guías, soledad, y kilómetros de negrura,otro camino distinto, poco viajado. Burgos ,oteo por si me saludan sus torres, pero no, esta noche no hay visita,solo una conversación muda, balanza de recuerdos, con quien ha muerto ,momentos detenidos , intentar recordar su voz,que ya se ha ido para siempre, su manera de andar, su cuerpo. Diez grados bajo cero,temor a las heladas a ser incapaz de llegar , a perderme yo también en la oscuridad y la lucha con el sueño, el engaño de detenerme si me duermo, no me da tiempo y paso el mal rato, me engancho a un coche,delante de mi, y es mi acompañante ,mi liebre , un amigo sin saberlo él. Pueblos en la lejanía tan cargados de historia que los aplasta,viven de ella ,del turista comilón. Y otra vez cruzo el Duero, de regreso y a otra cosa. Somosierra la noche clarea ,casi la he vencido,
que lento voy con la prisa que tengo. Madrid y una duda, pero gana el corazón ,me asomo y les miro ,dormidos y sin ruido me voy. Recojo a mi hermana, ella conduce ya, mas carretera, una maldición no poder volar,con a prisa que tengo. Una parada en el bar de carretera de otros tiempos, de familia y atascos, café y bollos y el hedor de la mala humanidad, de quien se ataca para reventar pronto. Regreso y más camino ,ya ha amanecido, recuerdos con quien conduce, el camino, muy viajado y algo abandonado ahora. Llamadas que se intercambian, casi ya llegamos y nos cruzamos con el cortejo, a la muerte también se la ha de cortejar,para que te deje en paz, nos integramos y sin saber muy bien que hacer, llegar a la casa, último adios, que de ahí sale el acompañamiento, primeras lágrimas, mis primos serenos,todos ,familia, a veces olvidada pero familia,raices y sangre compartida "ya has llegado" pocas palabras pero lo dicen todo. A la carrera casi, cómico si no fuera por la situación, el coche delante y el cortejo detrás y yo dentro mirándolo todo, las gentes se descubren, es un muerto y es del pueblo. La plaza, la iglesia, y no poder entrar, tan llena está, el cura a lo suyo , barriendo siempre para casa, se olvida la grandeza , lástima de Iglesia tan mal servida,tan abandonada. Pésame eterno, encuentro con primos y tíos,caras conocidas de nombre olvidado, ¡que pronto pasan veinte años sin verse! alguna lágrima más al recordar, y otra carrera detrás del coche, por fin el nicho y a descansar, mi padre muy entero y yo cerca, muy cerca. Da tiempo a pensar ,¿Quién sera el próximo,quién se irá? Mi tìo albañil es despedido por los suyos, que aguantan mientas le cierran en su nueva casa, fría, sola , él el
primero, sin prisa, Dios mio, otros te acompañaran. Y todos a ver a los suyos a parientes, cien años muertos, pero vivos en el recuerdo y en nuestra carne y nuestra sangre.
Prisas y de regreso a su casa ,un abrazo muy sentido ,mas recuerdos beso de despedida, los niños toman el testigo, no habrá mucho tiempo de tristeza. A otro sitio, a sufrir más, a ver a mi abuela, mayor, bien cuidada pero en ruinas, lucida a veces , tan débil que la enfermedad tiene menos fuerzas que ella, y conviven ,prorrogan la vida mas. Me reconoce y se ilumina grita mi nombre de pequeño, y yo dejo de ser hombre, de ser padre, para volver a ser niño en sus brazos ,en sus ojos y en su recuerdo. repasamos nuestras anécdotas . Muy buena mujer ha sido, abuela ,protectora de un diablillo siempre. Y el tiempo,el maldito tiempo que ahora vuela y anoche no andaba, un beso , y otro y otro y otro.
Regreso y despedida de mi hermana, se va aprender .Lejos muy lejos . Y yo regreso a mi vida, roto, agotado de lo tanto vivido y de lo poco que he dormido. Fiesta y celebración ,alejo la tristeza que alguien cumple años,pocos, ya crecerás y tendrás tiempo de saber ,de tristeza y pérdidas, ahora te cuido yo, no temas.
Domingo tranquilo, mis matas de pimientos muertas,congeladas de frío,las hojas marchitas, demasiado han durado este año, dos tomates sin dueño, y un proyecto de cena, los últimos, este año ya no habrá mas. Queda la próxima primavera, que llegará para todos. Quedan rosas tercas , que no saben que hace frío, a ellas les da igual.
El jueves madrugué,tenía un encuentro con alguien importante,alguien a quien no conocía en persona y de quien me he traído un trocito, yo creo haberme quedado allí un poco también. ¿están ricos los polvorones? jajajajajja,anticipo de navidad y sólo la confirmación de algo que sé desde siempre recibir es agradable pero mirar a quien recibe lo es muchísimo más. Un viaje rápido, otro coche ,mejor que el mio y mucha carretera,un camino que ya me sé de memoria,tantas veces lo he disfrutado y sufrido, los pueblos, los campos que varían en su ciclo ajeno a mis pensamientos pero adornardos, a veces alegrando mis ojos otras cooperando a mi tristeza. Ese viaje es uno en muchos,cada vez distinto, el mismo camino pero siempre cambian los personajes, el principal (yo) y los secundarios, los árboles,los pájaros, las líneas continuas de la carretera, los camioneros que te ayudan a pasarles y la comunicación que se establece al agradecérselo con los intermitentes. Medinaceli, siempre en lo alto llamando y siempre sin tiempo para detenerme. Los pueblecillos de Soria, su tiempo detenido, casi muerto. Un iglesia en lo alto ,para recordarnos lo efímeros que somos, un cementerio ,pequeño, con un rico dentro (su nicho es media camposanto,aguda aguja que pregunta al cielo) pueblos de tierra,gris como su futuro. Cuatro viejos al sol y cuando mueran, la nada,pareces caídas y raíces perdidas. Un bosque explotado,arañado antes de la capital,que no es tal si no un pueblo a quien se le olvidó crecer,a quien han dejado esquinado,no es camino a nada, no es meta de nadie. Soria sus dos ríos, Golmayo el pobre y el Duero ,historia y lentitud. algún edificio nuevo y el locutor de la radio intentando con su voz alejarnos de la sensación de traición a esa ciudad. más pueblos y una recta inmensa,ya cambia el clima se acerca mi puerto, más frío mas vegetación, algún recuerdo al cruzar el río Tera. Pocos viajeros y el último pueblo a este lado Poveda, un bar tristón y el mismo olor,el mismo viejo al sol, el mismo perro asustado. Subida al puerto y el primer placer ,la nieve a los lados, el túnel del faraón nunca acabará esa obra o lo hará cuando yo, ya no vaya más.
Nieve en la cumbre ,1770 mts, puerto de Piqueras. La primera fuente , una bajada entre árboles, una parada y alguna fotografía, en otro tiempo "A una hora del paraíso." Más bajadas y el río Piqueras,casi un bebé, mas tarde muere en el Iregua. Puentes,curvas y la naturaleza que se prepara para dormir, las hayas doradas . Mi fuente, los Eros, el río camina conmigo abajo, casi no se ve pero acompaña. Pueblos, mas alegres, Los Cameros y de repente la sierra se rompe para morir en llano. Ya queda poco ,más recuerdos de las veces que he parado, lilas,flores de frutales ...
Llego a la ciudad y con miedo a perderme , por una vez lo hago bien, un camino nuevo, una nueva persona , un pueblo historiado y una hora , campanas . Ya llegas un saludo ,saber que eres tú ,sin haberte visto antes, paseo ,mercado, vinito y mas paseo. Una comida escogida, un buen lugar y las horas que pasan sin sentir, estamos bien, hablar y conocerse. Los camareros nos miraban mal, tres horas de tertulia,de hablar y saber, de conocer. Más paseo,la tarde se quiere ir, el río claro, transparente, la fuente salada y las sensaciones, la noche,el frío y caminar y hablar. Iglesias antiguas,de rezos pegados a los cirios, de campanas cansadas de tanto marcar las horas. Escaleras, mil veces pisadas,bodas ,bautizos y entierros marcan nuestros tiempos. Intercambiamos nuestra música,alguna película . Un cena muy agradable y a dormir. Llega la mañana ,con malas noticias,una muerte, esperada pero siempre triste. Despedida y una duda que siempre me asalta, ¿regresaremos?.
Una larga perífrasis para acabar en una viaje de noche, terrible,cansado ,café y música, y prisas ,mala compañía. La noche, perfecta,mis estrellas colgadas,como guías, soledad, y kilómetros de negrura,otro camino distinto, poco viajado. Burgos ,oteo por si me saludan sus torres, pero no, esta noche no hay visita,solo una conversación muda, balanza de recuerdos, con quien ha muerto ,momentos detenidos , intentar recordar su voz,que ya se ha ido para siempre, su manera de andar, su cuerpo. Diez grados bajo cero,temor a las heladas a ser incapaz de llegar , a perderme yo también en la oscuridad y la lucha con el sueño, el engaño de detenerme si me duermo, no me da tiempo y paso el mal rato, me engancho a un coche,delante de mi, y es mi acompañante ,mi liebre , un amigo sin saberlo él. Pueblos en la lejanía tan cargados de historia que los aplasta,viven de ella ,del turista comilón. Y otra vez cruzo el Duero, de regreso y a otra cosa. Somosierra la noche clarea ,casi la he vencido,
que lento voy con la prisa que tengo. Madrid y una duda, pero gana el corazón ,me asomo y les miro ,dormidos y sin ruido me voy. Recojo a mi hermana, ella conduce ya, mas carretera, una maldición no poder volar,con a prisa que tengo. Una parada en el bar de carretera de otros tiempos, de familia y atascos, café y bollos y el hedor de la mala humanidad, de quien se ataca para reventar pronto. Regreso y más camino ,ya ha amanecido, recuerdos con quien conduce, el camino, muy viajado y algo abandonado ahora. Llamadas que se intercambian, casi ya llegamos y nos cruzamos con el cortejo, a la muerte también se la ha de cortejar,para que te deje en paz, nos integramos y sin saber muy bien que hacer, llegar a la casa, último adios, que de ahí sale el acompañamiento, primeras lágrimas, mis primos serenos,todos ,familia, a veces olvidada pero familia,raices y sangre compartida "ya has llegado" pocas palabras pero lo dicen todo. A la carrera casi, cómico si no fuera por la situación, el coche delante y el cortejo detrás y yo dentro mirándolo todo, las gentes se descubren, es un muerto y es del pueblo. La plaza, la iglesia, y no poder entrar, tan llena está, el cura a lo suyo , barriendo siempre para casa, se olvida la grandeza , lástima de Iglesia tan mal servida,tan abandonada. Pésame eterno, encuentro con primos y tíos,caras conocidas de nombre olvidado, ¡que pronto pasan veinte años sin verse! alguna lágrima más al recordar, y otra carrera detrás del coche, por fin el nicho y a descansar, mi padre muy entero y yo cerca, muy cerca. Da tiempo a pensar ,¿Quién sera el próximo,quién se irá? Mi tìo albañil es despedido por los suyos, que aguantan mientas le cierran en su nueva casa, fría, sola , él el
primero, sin prisa, Dios mio, otros te acompañaran. Y todos a ver a los suyos a parientes, cien años muertos, pero vivos en el recuerdo y en nuestra carne y nuestra sangre.
Prisas y de regreso a su casa ,un abrazo muy sentido ,mas recuerdos beso de despedida, los niños toman el testigo, no habrá mucho tiempo de tristeza. A otro sitio, a sufrir más, a ver a mi abuela, mayor, bien cuidada pero en ruinas, lucida a veces , tan débil que la enfermedad tiene menos fuerzas que ella, y conviven ,prorrogan la vida mas. Me reconoce y se ilumina grita mi nombre de pequeño, y yo dejo de ser hombre, de ser padre, para volver a ser niño en sus brazos ,en sus ojos y en su recuerdo. repasamos nuestras anécdotas . Muy buena mujer ha sido, abuela ,protectora de un diablillo siempre. Y el tiempo,el maldito tiempo que ahora vuela y anoche no andaba, un beso , y otro y otro y otro.
Regreso y despedida de mi hermana, se va aprender .Lejos muy lejos . Y yo regreso a mi vida, roto, agotado de lo tanto vivido y de lo poco que he dormido. Fiesta y celebración ,alejo la tristeza que alguien cumple años,pocos, ya crecerás y tendrás tiempo de saber ,de tristeza y pérdidas, ahora te cuido yo, no temas.
Domingo tranquilo, mis matas de pimientos muertas,congeladas de frío,las hojas marchitas, demasiado han durado este año, dos tomates sin dueño, y un proyecto de cena, los últimos, este año ya no habrá mas. Queda la próxima primavera, que llegará para todos. Quedan rosas tercas , que no saben que hace frío, a ellas les da igual.
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