Dos por uno

En brazos de la mujer , maduro.
En su pelo enredo mis manos,
en su vientre mi rabia.
A su espalda ,la sombra.
En su pecho mi aire.
En su palabra el sueño.
En sus noes mis esperas,
en sus sies ,
mi huida.


Desde la libertad que me da la distancia,
de ir necesitando menos,
de ir siendo aire diluido en viento,
solo un olor temprano.
Una risa que fue,
que ya no golpea.
Unas manos que se duermen en recoger espigas,
granos de tiempo común.
Una red,
de agujeros tan grandes ,
que los peces se dejan peinar por ella.
Sonriendo en el mundo de silencio.
"Este pescador debe ser tonto" No lo soy , hago camino delante de mi ,para que quien tenga prisa ... corra.Y quien lleve mi paso, me acompañe un trecho. Si dejo algún muerto ,lo entierro.